Pintar en cielo


Pintar el cielo es reflejar con colores lo cotidiano de la vida.
Colorear la vida es dejar a un lado las sombras e intentar alcanzar las estrellas que brillan en lo alto,
es acoger al que es diferente a nosotros y acompañar al que está a nuestro lado.
Cuando brilla el sol todo se ilumina, la luna da paso al resplandor de la verdad y la sencillez, los cometas pasan deprisa para recordarnos que la vida es efímera y que en nuestras manos está el vivir con plenitud cada momento.
En el universo no estamos solos, a veces nos cuesta creer esto y caminamos como si el firmamento fuese nuestro, como si fuésemos los poderosos reyes del mundo... pero si miramos hacia arriba nos daremos cuenta que es imposible que no exista vida más allá de nuestra mirada.
Por eso, en el día de hoy, pinto el cielo en una sencilla pared, para poder resaltar la belleza de la creación de Dios, puesta a mi alcance para dar gracias por todo lo que cada día me concede.
Me subo en la nave espacial del Amor y la entrega para decirle al mundo que es posible vivir desde la óptica de la fe.
Si mirásemos la vida con ojos de niño nos daríamos cuenta que la grandeza del cielo no reside en las pocas estrellas que nuestros ojos alcanzan a ver, sino en el mundo mágico de imaginar un firmamento plagado de seres y estrellas que nos iluminan y dan vida.

Encar


No hay comentarios:

Publicar un comentario