Arusha (Martes, 07-05-2013, Gaudium Press) La consternación de la Iglesia en Tanzania por el atentado terrorista ocurrido el pasado domingo 05 de mayo en la iglesia de San José, en Arusha, fue sentida en carne propia por el Nuncio Apostólico Mons. Francisco Padilla y el Arzobispo Josaphat Louis Lebulu, quienes se encontraban en el lugar del ataque y providencialmente resultaron ilesos. Mons. Padilla relató su experiencia de lo sucedido a Agencia Fides.
El lugar del atentado, frente al templo de San José, en Arusha. Los prelados, relató, "rodeados por una multitud de fieles, nos encontrábamos en el atrio de la Iglesia. Acabábamos de bendecir el agua que debía ser rociada sobre los fieles y el lugar de culto, cuando la bomba explotó a pocos metros de nosotros. No vi quién lanzó la bomba, porque los fieles, dada la ocasión, eran muy numerosos". El atentado ocasionó la muerte a tres personas y heridas a sesenta fieles.
"Ayer, yo y el arzobispo de Arusha, Mons. Josaphat Louis Lebulu, fuimos al hospital de la ciudad para visitar a los heridos y llevarles consuelo espiritual", comentó el Nuncio Apostólico, quien se manifestó preocupado por la salud de las víctimas. "Por lo menos cinco de los heridos se encuentran en estado grave hasta el punto de que ha sido necesario ingresarlos en Dar es Salaam (la ciudad más grande del país)".
Aún se desconocen los autores del atentado, y las autoridades de Tanzania han prometido realizar todos los esfuerzos para hallar a los culpables . "La policía todavía está investigando. Estamos a la espera de los resultados de la investigación", comentó Mons. Padilla.
Según fuentes locales contactadas por Fides, no existen indicios claros sobre la responsabilidad del ataque, y no se descarta que el atentado fuera realizado por grupos extremistas extranjeros. Según la policía, se han realizado seis arrestos de personas sospechosas de estar vinculadas al crimen.
Con información de Agencia Fides.
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