En este mundo de tristezas, de dificultades, donde paseando y paseando por las calles de nuestra ciudad, solo vemos individualidades, caras largas, tristes, donde la gente ha perdido la capacidad de maravillarse y su ilusión.
Seamos la esperanza y ... atrevámonos a sonreír a lanzarnos a la vida, a lanzarnos a bailar, hasta que nuestros pies no puedan más, llenemos de alegría e ilusión, todos los rincones por los que pasemos, bailemos y bailemos, no paremos, no dejemos de movernos, movámonos en este mundo estático, que está necesitado de movimiento atrévete a decir al mundo, estoy aquí, aquí para vivir y ser feliz, para amar y hacer felices a los demás.
Al igual que una peonza baila y baila, gira y gira, sin cesar y llega a todos los rincones, así seamos nosotros, que nuestra vida, nuestras experiencias, lleguen a los rincones más insospechados de la vida. Pongamos algo de Salsa, Merengue o Mambo, cuando nuestra vida esta necesitada de alegría, de movimiento, un buen rock and roll cuando nos encontramos sin salidas, un cha-cha-cha para divertirnos junto a los demás, una balada, un paso doble, un tango cuando tenemos al lado a alguien a quien queremos de verdad, muestra tu fuerza con un buen Flamenco y estate a la última con un Hip-hop.
Seamos positivos, seamos felices, no desfallezcamos, nuestra alegría llegará y llenará a los demás y como una chispa se trasmitirá contagiándolo todo, no pares es tan sencillo como dejarse llevar, Dios nos quiere alegres, llenos de vida, para eso nos la dio para amar y amarnos, para ser felices con los demás. Como un padre cuando disfruta viendo a sus hijos felices, así seamos nosotros, la alegría de nuestro Padre. Baila hasta cansarte y ve más allá.
Beatriz Pérez
(Valladolid)
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